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¿Sabías que el Síndrome de Fatiga Crónica afecta a más 7 de cada 100 mil personas a nivel mundial? Conoce sus síntomas y soluciones.

Por la Dra. Esmeraldas Bastidas. CEO de NEOCLINIC.

Image by Лера from Pixabay

Imagínate agotarte al menor esfuerzo o estar todo el día cansado y que el descanso no te ayude a recuperar la energía, y peor aún, a pesar del desgaste físico, no poder conciliar el sueño, lo que te genera problemas para pensar y concentrarte y en ocasiones incluso mareos. Estos son algunos de los síntomas del Síndrome de Fatiga Crónica.

El Síndrome de la Fatiga Crónica es una enfermedad grave y de larga duración que afecta a muchos sistemas del cuerpo. También se le conoce como encefalomielitis miálgica y afecta principalmente a personas que tienen entre 40 y 60 años.1

El cansancio extremo, presente en el Síndrome de Fatiga Crónica, suele durar más de seis meses y se presenta a diario sin una explicación aparente o a causa de alguna otra enfermedad. Si bien no se conoce con exactitud qué la ocasiona se sospecha que sus causas son infecciones virales o alteraciones a nivel cerebral. 2

La infección por el virus del COVID-19 está dejando muchas secuelas que hoy se conoce como Long Covid. El cansancio extremo, agotamiento al menor esfuerzo, insomnio y los mareos son síntomas constantemente reportados por pacientes que tuvieron COVID-19.

El COVID-19 generó una inflamación generalizada en el organismo de quienes se infectaron, generando un daño celular que está manifestando múltiples secuelas que todavía hoy se están estudiando.

A este daño se agrega que ante esta inflamación generalizada el cuerpo reaccionó secretando la hormona cortisol en grandes cantidades, que, sumado a la producida por el estrés diario, terminó por oxidar las células ya de por sí dañadas.

Se estima que a nivel mundial siete de cada 100 mil personas padecen Síndrome de Fatiga Crónica 2, sin embargo, existe un subregistro y pueden ser mucho más personas afectadas pues, los síntomas de este síndrome pueden confundirse con simple agotamiento físico por estrés, depresión o insomnio.

El insomnio, la mala calidad del sueño, falta de atención y pérdida de memoria, son secuelas neurocognitivas con las que todavía muchos pacientes siguen luchando vinculadas COVID-19 y que forman parte de los síntomas del Síndrome de Fatiga Crónica.

Células madre para regenerar el cuerpo

Frente a esta realidad, lo más importante es ayudar a nuestro organismo a recuperarse. Te comparto dos tratamientos clave para la regeneración de las células dañadas.

  1. Nutrición celular

Las vitaminas son la gasolina de nuestro organismo. Sin embargo, la edad, el estrés, los problemas físicos y metabólicos pueden impedir su absorción correcta incluso de los suplementos alimenticios.

La medicina ortomolecular (NEODRIPS) lleva grandes dosis de vitaminas, minerales y antioxidantes a nuestro organismo vía intravenosa, logrando una absorción del 99% de las mismas.

Dependiendo de las necesidades de cada paciente se pueden realizar fórmulas ideales para contribuir a:

Potencializar las defensas, elevar la energía, mejorar el estado de hidratación, incrementar la concentración y función cognitiva, controlar la ansiedad y la depresión, desintoxicar el sistema vascular y nervioso, disminuir el estrés e incluso aliviar la resaca.

  1. Terapia celular

Contribuir a la reparación de nuestro organismo, órganos y tejidos ya es posible gracias a la terapia celular, que consiste en llevar hasta ellos grandes cantidades de células madre.

Las células madre son la materia prima del organismo, tienen la capacidad de convertirse en cualquier órgano con el que entren en contacto.

La ciencia médica ha probado que cuando estas entran en contacto con órganos, si están dañados, promueven el desarrollo de nuevas células.

Si no encuentran daño, entonces le “recuerdan” al órgano cómo debe funcionar para contribuir a prevenir la aparición de enfermedades, incluso de tipo congénitas. 

La terapia celular NEOCELL también fortalece el sistema inmunológico y favorece el estado de ánimo y la recuperación de problemas neurológicos, pues al llegar al cerebro,  favorecen el incremento de la producción de dopamina, neurotransmisor que participa en la regulación de funciones motoras, estado de ánimo y comunicación neuroendocrina.

Con estas dos herramientas, los pacientes comenzarán a recuperar su energía y salud, la calidad de sueño y por ende la concentración.

Instagram: @draesmeraldabastidas y @neoclinicmx

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Fuentes:  

  1. Biblioteca Nacional de Medicina (S/F) Síndrome de fatiga crónica https://medlineplus.gov/spanish/chronicfatiguesyndrome.html#:~:text=El%20s%C3%ADndrome%20de%20fatiga%20cr%C3%B3nica,el%20realizar%20sus%20actividades%20normales.
  2. Secretaría de Salud (2016) Síndrome de fatiga crónica que afecta la calidad de vida https://www.gob.mx/salud/prensa/sindrome-de-fatiga-cronica-que-afecta-la-calidad-de-vida

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